A mi amigo el locutor, II

Entre el cuarto frió sumergido entre casetes y discos dejan plasmado su oficio...

Con cara de trasnocho y el animo en decadencia, oprimen el botón de "Play" y colocan una canción en competencia...

Y mientras el disco suena, sus ojos creen que sueñan ser alguien normal, ser humano y encontrar un amigo que le tienda la mano...

Suena teléfono, suena otra vez, algunos lo llaman para pedir una canción, pero otros lo insultan hiriendo su corazón...

Mientras esto sucede, el reloj marca las seis, hora de informarle al publico, que ha comenzado a llover...

Como me gustaría complacerlos a todos, desde una canción de Juan Luis Guerra, hasta un anuncio de Marlboro...


Pero se que es imposible, tratar de hacer lo posible, sabiendo que en el planeta, los humanos son incomprensibles..

Y este grito se levanta un día tan especial, hoy día del locutor, debemos recordar, que ellos son seres visibles y dedican toda su vida, llevarnos un mensaje de amor y hacernos un poquito mas sensibles...


Esto fue escrito el 18 de abril 1997, dedicado a mi amigo, Cesar Rosario, locutor de la emisora Disco 106, en esa época....