Soñé con ser poeta, pero mi inspiración fue a parar a
la cuneta…
La ultima vez que vi mi corazón, fue cuando lo
arrojaron encadenado dentro de un cajón, porque quería decirte tantas cosas
bonitas, y al final, ni bonitas, ni decirlas…
Un huracán de palabras formaba un torbellino, un ángel
voló por mis sentidos, mis ojos cerrados, mi cerebro quebrado, aun así,
intentaba un poema, y mírenme me doy pena…
Seguían las horas pasando, yo reflexionando, esforzando
mi mente, pero una demente tenía más inspiración, aun así, seguía tratando de escribirte
algo que llegara a tu corazón, perdón no logro llamar tu atención….
Llego la noche y la vecina me echo un boche, porque tenía
música para inspirarme y entendía que era un derroche, le pedí disculpa y como
quiera me echo otro boche….
Ya era de madrugada y todavía no había escrito nada,
mire por la ventana y la luna se escapaba, las estrellas les seguían, una se
quejo que yo la miraba….
Estaba muy cansado, agotado y cualquier otra palabra
terminando en ado, decidí que hoy no era el día para ser poeta, será otro día,
cuando mi inspiración no este a la altura de la cuneta….