cada 30 días....

Quisiera esconderme bajo tierra para no escuchar tus rabietas, porque un día de estos, puedo quedarme bajo ella… Cada 30 días, la naturaleza femenina se renueva y nace una nueva vida…. Pero son tiempos difíciles, los hombres tenemos que pisar muy fino, pues el humor se convierte en terror y tu mejor chiste es un error… Cada 30 días, se repite la historia, varían por días, pero tu personalidad cambia de repente y yo quedo entre en la espada y la pared, y tu sonríes de repente… En esos días, no sé si es mejor volverme invisible, porque hasta cuando estornudo tu respuesta en vez de salud, es un insulto… Cada 30 días, tengo que aguantar la rutina, tu dejadez y tu falta de interés, y lo sé no te culpo, se que tengo mis manos, pero mejor no las uso…. Cuando pasan esos días, vuelve todo a su lugar, yo viendo la tele y tu chateando en tu celular… Autor, Juan Pablo Peña Pallamps